Encuentro este elaborado artículo de Anna March en un tweet de @JordiValls13 sobre un libro que expone cómo una vez superado el terror a las invasiones de los microbios con las técnicas inmunológicas, ahora estamos sometidos a la violencia neuronal de la multitarea, la autoexigencia de superrendimiento y la sobredosis de estímulos «informativos», que no nos dejan ni conversar entre nosotros, ni mirar por la ventana o hacia el mar…